El lugar especial que volvió a conectar a un equipo y a dos conocidos después de 13 años.
En 2009, el fundador de Chile Nativo Travel, Gonzalo Fuenzalida, viajó con sus amigos Flavio Haddad y Antonio Cardoso en una expedición a caballo de 14 días desde Bariloche, Argentina hasta Puerto Varas, Chile. El viaje se corrió a través extraordinarios paisajes de la prístina y virgen Patagonia, pasando por un lugar particularmente especial – Rincón Bonito – un campo remoto del Valle Ventisquero en la cuenca del río Puelo de la comuna de Cochamó ubicado en el extremo norte de la Patagonia chilena.
Compartir con los lugareños a lo largo del camino, ya sea un asado tradicional o un mate, fue una parte integral del viaje de dos semanas de los amigos. Y fue durante este tiempo que Gonzalo, Flavio y Antonio conocieron a una mujer muy especial, Bernarda Alegría, o como la mayoría la conoce, Bernardita, una residente desde hace mucho tiempo de Rincón Bonito y Puelo. Ella comparte un profundo amor por esta región única, sus paisajes, silencio y soledad.
Rodeado por los Parques Nacionales Pumalín y Hornopirén, Rincón Bonito es considerado una iniciativa de conservación privada que ofrece un valor ecológico increíble a la región, y fue el destino elegido para el viaje de fin de temporada 2022 del personal de Chile Nativo en mayo. Llegando en avioneta, los miembros del equipo de Chile Nativo disfrutaron de un sobrevuelo inolvidable de esta remota región y sus impresionantes vistas de fiordos, montañas, volcanes, glaciares, lagunas, ríos y bosques. Una vez en el terreno en Rincón Bonito, el equipo fue recibido por Verónica Cuevas y Juan Cortés, una joven pareja de lugareños que trabajan en colaboración con la iniciativa Rincón Bonito, Rodrigo Condeza, coordinador dedicado de la iniciativa y guía local en Rincón Bonito, y Bernardita que esperaba para dar la bienvenida al equipo de Chile Nativo a su llegada. Después de 13 largos años, Gonzalo y Bernardita se reencuentran tomándose la misma foto que habían compartido juntos en el año 2009 en Rincón Bonito.
Rincón Bonito se ubica en medio del Valle Ventisquero, un valle glaciar cuyo río del mismo nombre fluye de oeste a este, corriendo 41 km desde su nacimiento glaciar hasta su unión con el río Puelo, el río más largo de la comuna de Cochamó con una longitud de 120km. El río Puelo no solo proporciona sustancia vital para los bosques y valles de la región, sino que también sirve como conducto para millones de microorganismos que son transportados desde los glaciares hasta el estuario, brindando nutrientes a especies de todo el mundo. *El río Puelo forma parte de los Bosques Templados Lluviosos de los Andes Australes que fue declarado como una Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 2007. Esto significa que Chile tiene un rincón del mundo muy importante que es un pilar vital de la ciencia, la sostenibilidad y la conservación.
Este fragmento del planeta ha sido reconocido por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) como una de las 200 áreas clave en la conservación internacional y como una de las 25 eco-regiones más valiosas y amenazadas del mundo, representando el 0,9% de los bosques húmedos templados del orbe. Estudios científicos avalan la importancia del río Puelo para los ecosistemas, que entrega alimento a muchas especies marinas como la ballena azul. Por estas razones, ha habido argumentos de los residentes y miembros de las comunidades que se oponen a cualquier desarrollo o progreso que implique la obstrucción del ciclo natural que conduce el río.
Bernardita, como muchos de los residentes de Puelo y Rincón Bonito, son los importantes protectores de las aguas en esta región única que buscan proteger el libre flujo del río Puelo, que determina la vida y el sustento de todos los ecosistemas que atraviesa, no solo la flora y la fauna, pero también las personas que viven en armonía con este precioso entorno.
*Corporación Puelo Patagonia, “Puelo, Reserva de Agua”
La historia de lo que ahora se conoce como Rincón Bonito comienza a mediados de la década de 1920 con la colonización del Valle que se dio con el segundo movimiento migratorio de El Bolsón en Argentina. Esta colonización estableció un estilo de vida rural y campestre único influenciado por la cultura de la Patagonia y las condiciones de aislamiento de esta ubicación geográfica. La agricultura y la ganadería de subsistencia son hasta el día de hoy la principal actividad pero poco a poco el turismo se va transformando en una importante actividad económica gracias a la belleza natural y auténtica del paisaje y la cultura.
En 1999, el terreno fue comprado por Douglas Tompkins para el proyecto Pumalín, lo que requirió un gran trabajo de restauración para hacerle honor a su nombre “Rincón Bonito”. Afortunadamente, algunos de los árboles antiguos sobrevivieron a la tala que ocurrió, pero la mayor parte del campo estaba estéril. Con la visión de preparar el terreno para la economía post petrolera, se sembraron flores y árboles frutales, se restauraron suelos y se construyeron huertas e invernaderos para brindar alimentos orgánicos a los pobladores rurales.
En 2013 Rincón Bonito fue vendido por Tompkins Conservation a dos hermanos chilenos Fernanda y José Claro, con lo que se inició una nueva etapa para esta tierra. Fue necesario reconstruir invernaderos, renovar cercos y portones, y mejorar la pista del aeródromo que se hace accesible la zona en avioneta. Se abrieron antiguos senderos para explorar el campo y sus alrededores, y se construyó una casa de montaña totalmente autosuficiente y refugios de glamping fueron construidos para el disfrute de los visitantes. Con paciencia e ingenio, debido a su remota ubicación, los resultados buscan estar en armonía con el medio ambiente. Rincón Bonito da la bienvenida a los visitantes a vivir una estancia única, cuidando el medio ambiente y a su vez, junto con su visita, generar un equilibrio de desarrollo sostenible y de bajo impacto.
*Rincón Bonito
Por estas razones, entre otras, era obvio que Rincón Bonito era el lugar perfecto para reunirnos como colegas y amigos en nuestro viaje anual de personal de fin de temporada. En el transcurso de 5 días, nos conectamos con este preciado lugar disfrutando de increíbles aventuras, conociendo personas inolvidables y transformándonos como personas y como equipo.